¿Es el póquer de bolas pequeñas en los juegos de efectivo una buena estrategia?

Todo en el póquer debe cumplir con una frecuencia. O hay demasiado de algo o nada en absoluto. Por ejemplo, puede optar por retirarse mucho, o tal vez sea alguien que paga muy poco. Puede considerarlo como un equilibrio.

Las estrategias de póquer pequeño y grande funcionan con frecuencias. El póquer de bolas pequeñas te ofrece una gama más completa y puedes jugarlo con rigor. Big Ball, por el contrario, es exactamente lo contrario. Son limitados en su rango, aunque no demasiado pasivos.

Esta publicación le dará más información sobre la estrategia del póquer de bolas pequeñas.

Póquer de bolas pequeñas en juegos en efectivo

El póquer de bolas pequeñas juega con ventaja. Los jugadores con una mano fuerte tienden a llamarlo para manos medianas. Nunca te dejan ganar con mano fuerte.

Por el contrario, el póquer de bolas grandes permite a los jugadores retirarse debido a sus manos mediocres. Esto se debe a que no quieren dejarte ganar con una mano fuerte.

Ambas estrategias tienen derecho a una imagen cuando se usan de manera ambigua. Es un tema de preocupación más amplio. Sin las matemáticas correctas, no sería fácil prosperar en el póquer. Cuando se elabora una estrategia para mantener el equilibrio, el póquer es un buen juego.

Sin duda, puedes optar por estrategias de bolas pequeñas en los torneos de póquer. Los jugadores de torneos de póquer obtienen pilas de menos de 50 ciegas grandes. No puedes lidiar con 100 BB o más en un torneo con tanta frecuencia. Las probabilidades de que más de un jugador tenga esa pila son vagas.

Hay una mentalidad de supervivencia constante en los torneos de póquer que en juegos de efectivo. Los resultados de los torneos de póquer son definitivos. Cuando seas tú el que se rompa, el juego habrá terminado. Cantar faroles en este tipo de juegos es complicado.
Tales ratios de acumulación y la mentalidad de supervivencia a menudo resultan en una mala probabilidades implícitas en cada mano de un torneo. Esta es la razón por la que debería optar por mejores frecuencias y estilos abrasivos para obtener resultados más notables. Robar botes pequeños puede equilibrar las negatividades de disparar ciegas y pilas fluctuantes.

Con un bote de pilas, es poco probable que tengas dos manos más grandes que se revelen. La bola pequeña te cubre para siempre.
Los juegos de efectivo se ocupan de la opulencia en lugar de la supervivencia. Los botes grandes son los mejores crupieres en los juegos de efectivo. Aquí, las probabilidades implícitas te gobiernan. En cambio, las macetas pequeñas pueden crear una imagen para ti. Rara vez te dan el resultado deseado, a diferencia de los torneos.

Notas finales
El póquer de bolas pequeñas en general es una estrategia maestra para usar, pero no en los juegos de efectivo. Lo mejor sería apuntar a enfoques alternativos para hacerlo.

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